Retrasados mentales vocacionales

Por desgracia, recalco lo de por desgracia, todos los días tengo que andar en coche. La cantidad de retrasados mentales vocacionales sigue en aumento. Me refiero a esos chavales de entre 18 y 25 tacos que aún no tienen pelos en los huevos y circulan con unos vehículos suicidas de más de 120 cv. Hoy sin ir más lejos, por el centro de Ferrol, me adelantó uno por la carretara de Catabois (limitado a 50) pues no iría a menos 90 ó 100 km/h. Al final tuvo que parar delante de mí en un semáforo y ya lo entendí todo. Música de rigiton (ya sé que así no se escribe, pero para la mierda que es no lo voy a escribir bien), seat leon con cien mil caballos, color amarillo. El chaval hasta era majete, tenía veinte piercing y un aro en el fuciño como los de colgar a los cerdos, tatuajes de la puta madre que lo parió y mirada de perdonar la vida cada segundo y eso que en mi pueblo dirían que no tenía ni una hostia. Detrás se me puso otro con cara de gitano (pero bueno de la tierra, es decir de los de aquí, enxebre, gitano de lacón con grelos y churrasco) y ya me cayó mejor porque se puso a la altura del chulito del coche amarillo le enseñó el dedo corazón y lo dejó tan tirado en el semáforo que se le caló el coche. El pobre latinking o puñeta o ñeta o como coño sean esos retrasados, se quedó con cara de palo, el coche ya no le encendió más y tuvo que llamar a la grua. Por favor a todos esos criminales al volante que van a mil por hora, no respetan a nadie, beben al volante, etc., no salgáis de casa, seguro que lo agradeceréis, mirar el "Diario de Patricia" y después cuando acabe os vais a tomar por culo un rato.