Prohibido el paso.

Al gran ayuntamiento de pulpopolis no se le ha ocurrido la gran idea que cerrar al tráfico la carretera desde el Castillo de la Palma al Segaño (con dos cojones) y no han tenido mejor idea de esos cerebros iluminados por la mierda, que poner varios tablones en vertical cerrando la misma una vez pasado el Castillo donde estuvo el otro iluminado por el 23 f (Guardia civil de los de antes, con bigote y mala hostia).
A los ya famosos tablones les han puesto unos reflectantes de moto (me imagino que los pillaron en alguna chatarrería) en la parte superior que no los ve ni su puta madre, además con el peligro de que como vayas un poco despistado mirando hacia el castillo, tocándole los muslos a la parienta o viendo la ruina del puerto exterior ya sabes lo que te va a pasar, que te cagarás en san Pito Pato, le quitarás la mano a la parienta, saldrás del coche y verás lo que te ha pasado. Puedes reclamar, me imagino que al Dios de la guerra y cargarte a quién colocó las maderitas, al maderero, a toda su familia, a sus mascotas, a sus vecinos, pero al ayuntamiento del pulpo, nooooooo.
Además lo bueno que es para la gente que visita esa zona que tenga que ir andando hasta el final ya que no puede ir en coche, bueno son solo siete kilómetro ida y vuelta, pienso que el ayuntamiento lo hace para que caminemos, que buenos son, pero ¿y esa gente que no puede caminar y quiere ir en coche para ver las vistas? Se tendrán que joder, pensó el que colocó los tablones. Gracias ayuntamiento pulpopolis, gracias por pensar en todo cabezas huecas y sobre todo os darán las gracias las personas que por minusvalía o por vejez no puedan ir en coche, gracias.